La primera exposición de grupo que hemos tenido ha ido sobre el tema de los niños con altas capacidades intelectuales, mayormente conocidos como “superdotados”.
En primer lugar, me gustaría comentar que la exposición y representación del tema por los compañeros me ha gustado mucho, han explicado muchos conceptos sobre el tema y comunicado bastante información que desconocía totalmente. Ha sido muy ameno y dinámico con power point, videos, actividades, etc.
Tras la exposición, mis conocimientos sobre este tema han aumentado y ahora puedo sacar una opinión personal respecto a este colectivo.
Pienso que se trata de un grupo muy heterogéneo y desconocido para una gran parte de la sociedad. Las personas con altas capacidades intelectuales suelen tener fracaso escolar y estar excluidas en su entorno escolar al no saber adaptarse a él. Culpa de esta situación la tiene el sistema educativo que no se adapta a las necesidades de estas personas y no saben tratarlas para estimularlas y fomentar sus potencialidades, sino que son tratadas a veces con hiperactividad o como agresores o víctimas de bullying. Pienso que no se le da la tención escolar que necesitan.
Las instituciones sociales tampoco suelen intervenir ante situaciones individuales de este tipo, debido a la ausencia de conciencia de grupo que suele tener este colectivo.
Al ver uno de los videos que nos mostraron en clase donde aparecía una niña con altas capacidades intelectuales, pensé por primera vez que se trataba de una niña repelente y redicha, pero luego comprendí que debe de estar liada al no saber explicar lo que quiere al pensar como niña y como adulto a la vez.
En este video también me sorprendió ver las dificultades que tienen estas personas para reconocerlas como superdotadas, ya que tienen que pasar numerosos test y pruebas y el niño acaba cansándose y aburriéndose. Este hecho afecta a las familias al no saber qué deben hacer ante estas situaciones, sintiendose desinformadas y desprotegidas.
Ante estos casos considero fundamental la intervención de los educadores sociales, tanto desde los Servicios Sociales como desde las Instituciones Educativas, ya que no existe especialización sino desconocimiento sobre este tema. Por lo que es imprescindible el papel de este profesional, que puede intervenir con este colectivo para mejorar su bienestar. Para ello, pienso que puede trabajar la conciencia de grupo y la participación sobre este tema así como las habilidades sociales para que adquieran capacidades de comunicación y relación.
Personalmente, antes de esta exposición, este colectivo era muy desconocido para mí y no poseía ninguna formación con respecto a mi futuro laboral sobre este tema. Lo considero una problemática porque es un colectivo mal atendido. Existe mucha responsabilidad por parte de la familia y de los educadores porque pueden llegar a aprender conductas conflictivas y no llegar a cubrir las necesidades que presentan, incluso las propias asociaciones que se dedican a esto pueden beneficiarse de estas personas sin tener en cuenta las necesidades y situación de cada niño. Aunque más que considerarlo problema se debería potenciar y estimular esas capacidades que tiene el niño con el fin de mejorar su calidad de vida.